MALALA Y SU LUCHA POR LA EDUCACIÓN
La
mayoría de nosotros hemos oído hablar de Malala
Yousafzai, una activista paquistaní que se rebeló a favor del derecho de las mujeres a la educación en un momento en
que los talibanes prohíben el acceso a la educación para las niñas. Ella
recibió un disparo en la cabeza por desafiar las órdenes y aún así, ella sigue
luchando.
Por
su labor y valentía, se ha convertido en un icono de la lucha por la educación
universal y en la persona más joven galardonada con el premio Nobel de la Paz.
La
historia de Malala comienza en 2009, cuando la niña tenía 12 años y los
talibanes paquistaníes prohibieron a las niñas acudir a la escuela.
Entonces ya era una férrea defensora de su derecho a recibir una educación y comenzó a escribir un blog en la página de la BBC en udu (una de las
lenguas que se hablan en Pakistán), cómo iba a clase de forma clandestina, sin
uniforme, escondiendo sus libros, bajo el seudónimo Gul Makay.
“En el mundo - escribía la joven - las chicas
van a la escuela libremente y no hay miedo, pero en Swat (valle donde
vive en Paquistán) cuando vas a la escuela tienes mucho miedo de los talibanes. Ellos
nos matarán. Nos lanzarán ácido a la cara. Pueden hacer cualquier
cosa”.
El 6
de octubre de 2012, finalmente las amenazas se convirtieron en
realidad. Un grupo de hombres armados llegó a la escuela. Preguntaron
por ella y la esperaron a la salida. Después, subieron al autobús escolar
y le dispararon a bocajarro en la cabeza y el cuello,
dejándola al borde de la muerte.
En su
libro “Yo soy Malala. La joven que defendió el derecho a la
educación y fue tiroteada por los talibanes”, escrito con Christina Lamb
nos expone su realidad y la de las niñas y mujeres en Pakistán.
He aquí algunos fragmentos que
nos invitan a reflexionar:
Capítulo 1.
Ha nacido una niña.Página 21.
Cuando
nací, los habitantes de nuestra aldea se compadecieron de mi madre y nadie felicitó
a mi padre. (...) Era una niña en una tierra en la que se disparan rifles al
aire para celebrar la llegada de un hijo varón, mientras que a las hijas se las
oculta tras una cortina y su función en la vida no es más que preparar la
comida y procrear. Para la mayoría de los pashtunes, cuando nace una niña es un
día triste”.
Capítulo 9. El mulá de la radio. Página 129-132
Las
emisiones de Fazlullah con frecuencia iban dirigidas a las mujeres. Y decía:
“Las mujeres deben cumplir sus responsabilidades en el hogar. Sólo pueden salir
en caso de emergencia, pero entonces deben llevar velo”.(...) A mí me causaban
confusión las palabras de Fazllulah. En el Corán no está escrito que los
hombres tengan que salir y las mujeres permanecer en casa todo el día. (...) El
Mulá de la radio dirigió su atención a las escuelas. Empezó hablando contra los
directores de los centros de enseñanza y felicitando por su nombre a las niñas
que habían dejado de estudiar. (...) A las niñas
que,
como yo, seguíamos yendo al colegio, nos llamaba búfalos y ovejas.
Mis
amigas y yo no podíamos entender qué tenía de malo. “¿Por qué no quieren que las
niñas vayamos a la escuela?”.
REFLEXIONA SOBRE
- ¿Cuál es el papel de la mujer en
Pakistán?
- ¿Por qué Malala defiende el
derecho de las niñas a ir al colegio a pesar de estar amenazada por los
talibanes?
- ¿en qué se parecen y en qué se
diferencian las costumbres en Pakistán y en nuestro país?.